Hoy más que nunca es preciso disponer de argumentos para marcar la casilla de la Iglesia católica. Aquí mostramos los 10 más importantes.

1 Es una forma sencilla de colaborar con la Iglesia. No implica trámites engorrosos. A la hora de hacer la Declaración de la Renta, basta con marcar una X en la casilla de la Iglesia. Y si he recibido el borrador en mi casa, debo comprobar que la casilla aparece marcada. En caso contrario, modificarlo es muy sencillo.

2 Es absolutamente gratis. No me van a cobrar más por mi declaración al marcarla ni me van a devolver menos por hacerlo. En definitiva, no me cuesta nada.

3 Marcar la casilla demuestra mi compromiso y adhesión a la Iglesia y a la actividad que realiza. Con ello, me siento un poco más Iglesia.

4 Es una de las pocas cosas que puedo decidir sobre mis impuestos. Pero si no lo hago, es decir, si la dejo en blanco, dado que voy a pagar lo mismo, será el Estado el que decida por mí sobre esa pequeña cantidad.

5 Con mi gesto y el tuyo demostramos a la sociedad que somos muchos los que valoramos la labor que realiza. Cada año 9 millones de personas asignan a favor de la Iglesia, lo que supone, al día de hoy probablemente, el mayor gesto de adhesión a una institución que se da en nuestro país de manera anual.

6 Es mi obligación como católico. Marcando la casilla ayudo a sostener la Iglesia en el desarrollo de todas sus actividades: mantener al clero, el anuncio del Evangelio, la vivencia de la fe y la inmensa labor asistencial que desarrolla en España y en todo el mundo.

7 Marcar la casilla de la Iglesia supone decir claramente “sí” a la libertad religiosa, consagrada en la Constitución española y a su ejercicio pleno y efectivo en una sociedad plural y democrática. Una sociedad aconfesional, pero que valora el hecho religioso como una de las dimensiones fundamentales de la persona, tal y como lo proclama el artículo 16 de nuestra Constitución.

8 Es mi decisión libre y democrática. Una decisión que no perjudica a nadie y que es plenamente compatible con otras opciones. En la actualidad, se pueden marcar simultáneamente las casillas de la Iglesia católica y de otros fines de interés social. Excepto en País Vasco y Navarra. Más información en www.portantos.es

9 Es el dinero mejor invertido. Puedo conocer cada año, a través de la Memoria Anual de Actividades de la Iglesia, en qué emplea sus recursos. Las cifras sobre la actividad celebrativa, evangelizadora, educativa, en defensa del patrimonio cultural e histórico artístico o la inmensa actividad asistencial, demuestran año a año el enorme servicio que prestan las instituciones de la Iglesia en nuestro país.

10 Por eso, para los no católicos o no practicantes marcar la casilla supone también reconocer el papel que la Iglesia tiene en la sociedad española, especialmente con los más necesitados. En los últimos años, las instituciones de la Iglesia han jugado un papel fundamental para paliar los efectos de la grave crisis económica sufrida.

FERNANDO GIMÉNEZ BARRIOCANAL
Vicesecretario para Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Española.