El pasado sábado, a la vez que se celebraba el tradicional retiro de Cuaresma, se dieron cita los 6 grupos de ejercicios espirituales en la vida diaria que hay en nuestra Diócesis.

Algunos de ellos ya llevan un recorrido más dilatado en el tiempo, ya 3 años, y otros se podría decir que desde hace tan solo tres meses, están dando los primeros pasos al descubrir cómo, en medio del ajetreo de cada día, si afinamos la mirada, descubrimos a Dios, que nos llama a una mayor adhesión a Él, buscando en todo amarle y servirle.

En Santander son 4 los grupos que se reúnen: 2 en el espacio Sicar de la Diócesis de Santander (en la Casa de la Iglesia; en este grupo participan ejercitantes de Suances y Reinosa), otro en la parroquia de la Anunciación y un último en la parroquia de Ntra. Sra. de Montesclaros y Sta. María Micaela. En Castro Urdiales son 2 grupos los que también desde hace poco más de un año y medio, se reúnen semanalmente para ejercitarse.

En el encuentro participaron 21 ejercitantes que, acompañados por D. Alejandro Castillo Urquijo, tuvieron una jornada de acción de gracias por el recorrido que está significando esta experiencia de ejercicios en sus vidas. Nos explica que esta es una modalidad más, dentro de la gran variedad de modos de ejercitarse, cuyos encuentros semanales se convierten en un buen modo de sostener una vida de fe exigente.

Tras una oración, se pasó a realizar un ejercicio en que se dio gracias. Después se tomó un café compartiendo un agradable rato de convivencia y se terminó el encuentro con la Eucaristía.