El pasado sábado puso rumbo al Cerro de los Ángeles, en Getafe, un autobús con 70 peregrinos de nuestra Diócesis, de: Santoña, La Cavada, Astillero, Muriedas, Maliaño, Santander, Mortera, Viveda, Santillana, Virgen de la Peña, Reinosa…

Dos días por delante para ganar un jubileo que este año recuerda el centenario de la Consagración de España al Sagrado Corazón de Jesús que hiciese el rey Alfonso XIII en 1919.

En medio de la incertidumbre política y de los problemas territoriales que afronta nuestra nación, sigue siendo necesario que cada uno renueve esa consagración. En muchas parroquias de nuestra Diócesis se sumaron a este acto el pasado 29 de junio, y esta peregrinación acercó a este histórico lugar.

Durante el camino, acompañados de 39º, fueron varias paradas las que se hicieron necesarias para poder descansar el viaje. De estas paradas, una fue en el Convento de las Hermanas Clarisas de Chinchón, a las que acompañaron en el rezó de Vísperas, y a las que agotaron las existencias de las exquisitas rosquillas que salen de su obrador.

Ya en el hotel, en Pinto, descansaron para al día siguiente tener la visita al Cerro. Allí celebraron la Eucaristía que presidió nuestro Obispo, D. Manuel, acompañado de otros tres sacerdotes de la Diócesis y del Obispo de Getafe, D. Gines.

Tras la Misa, en que ganaron las gracias jubilares (rubricadas en la «corazonada» que recibieron a modo de compostelana que acreditase su peregrinación), tuvieron una visita guiada al Santuario, al Seminario, al Monumento antiguo y el nuevo, a la capilla de Santa María de los Ángeles y al monasterio de las Madres Carmelitas.

A muchos les sorprendió, porque nunca lo habían visitado y la sensación general ha sido muy positiva. Muy satisfechos por lo vivido en este intenso fin de semana cuya expedición concluyó ayer a las 10 de la noche, que llegaron a Santander.