A las 17:00 del Domingo 24 de julio, víspera de Santiago apóstol, patrono de España, el Obispo de Santander, Mons. Manuel Sánchez Monge, ha ordenado a Ramón Gómez Ruiz, santanderino de 25 años.
El Obispo de Santander, Mons. Manuel Sánchez Monge, esta tarde en la Catedral, ha ordenado un nuevo sacerdote para la Diócesis de Santander, el Rvdo. Sr. D. Ramón Gómez Ruiz. Un acontecimiento de relevancia para toda la Diócesis y en especial para las parroquias donde el neosacerdote ha estado ayudando en las pastorales de fin de semana durante su formación en el Seminario y ya ejerciendo el diaconado.
Ramón será el sacerdote más joven de la Diócesis por unos años, hasta que otro le quite el puesto de sacerdote joven en edad. Durante el tiempo que ha durado su formación ha podido profundizar en la cercanía con el Pueblo de Dios, desde la vivencia de los distintos sacerdotes que ha conocido en sus distintas parroquias de pastoral en los años de Seminario: las parroquia del Valle de Soba, de donde es oriunda su familia, del Santo Cristo de Maliaño, donde descubrió su vocación, las parroquias del Valle de Ruesga y Arredondo, la parroquia de la Santa Cruz de Bezana y la parroquia de Santa María de Cueto.
Su proceso vocacional ha sido dilatado, puesto que entró en el Seminario Diocesano de Monte Corbán con 13 años, y por ello son muchas las personas que a través de los distintos encuentros y celebraciones lo han podido conocer y tratar y han podido experimentar su sorna y gran capacidad de escucha.
Entre los destinos que siempre deseó fue ser cura de pueblo. Aún no sabemos cuál será el destino pastoral que le dará el Sr. Obispo, pero lo cierto es que ese mundo rural ya lo ha podido ir conociendo en las parroquias donde ha sido destinado como diácono en la zona de Unquera y hasta ahora en el Valle de Mena con sus 52 parroquias.
Durante la celebración, nuestro Obispo D. Manuel, le invitó en la homilía prestando atención a la segunda lectura a que “No confíes en tus fuerzas y cualidades, hermano Ramón, porque el mérito es todo de Dios. No olvides que el poder de Dios se manifiesta precisamente en la debilidad de los hombres” y le invitó desde ahí a confiar en Dios y a ser testigo de la misericordia de Dios. También le amonestó a que descubriese que ha sido ordenado para servir y por ello, “El ministerio sacerdotal no es para sobresalir, sino para trabajar humildemente por los más débiles y necesitados.” Finalmente nuestro Obispo, D. Manuel, invitó a todos los presentes a “emplearnos muy a fondo en rezar por las vocaciones sacerdotales y en animar positivamente a los posibles candidatos para que ingresen en el Seminario en los cursos venideros”, para lo que se hace necesario buscar estas vocaciones sacerdotales en las familias y en los ambientes donde están los jóvenes.
Mañana a las 12:00 celebrará la Misa en Villasana de Mena, en la parroquia de Ntra. Sra. de las Altices y el próximo jueves 28 será su Cantemisa, a las 12:00 en la parroquia del Santo Cristo de Maliaño.