Con la elección en la jornada de este sábado 27 de febrero del nuevo Consejo Diocesano de Pastoral, han quedado constituidos los órganos que auxilian al obispo de Santander, Mons. Manuel Sánchez Monge, en el gobierno pastoral de la Diócesis cántabra.
Los nombramientos son consecuencia de la elección, el 30 de mayo pasado, del nuevo obispo de Santander. El Código de Derecho Canónico, señala que tras un nombramiento episcopal, se deben de elegir los miembros de los órganos que forman parte de la estructura episcopal.
Así, a lo largo de esta semana quedó constituido el nuevo Consejo Episcopal de Gobierno que es un órgano fundamental que coopera con el obispo en el oficio pastoral.
Su composición, integrada por ocho miembros, ha quedado formada por el propio prelado de Santander, Mons. Manuel Sánchez; al que acompaña, como Vicario general, el padre agustino, Manuel Herrero Fernández, que repetirá al frente de este cargo y que en la actualidad también es párroco de La Virgen del Carmen del Barrio Pesquero de Santander.
Este consejo incorpora a partir de ahora la figura de un Pro-Vicario General, cargo que ha recaído en el párroco de Castro Urdiales, Sergio Llata Peña, que hasta ahora era Vicario territorial. Su misión será la de ayudar en las tareas de la Vicaría General del obispado.
Entre las novedades también figura la recuperación de la figura del Vicario de Pastoral, que ocupará Juan Carlos Rodríguez del Pozo, actual párroco de La Asunción de Torrelavega.
Asimismo, se incorpora al nuevo consejo Episcopal, en calidad de Ecónomo Diocesano (asuntos económicos y administrativos), José Ramón Ocejo Gutiérrez, párroco de La Cavada, Riotuerto y San Roque.
Por su parte, Isidro Pérez López, continuará como Canciller-secretario general del Consejo Episcopal, tarea que continuará compaginando con la parroquia de Santiago de Santander.
Otra de las novedades es la incorporación de dos arciprestes al Consejo Episcopal, cargos que han recaído en José Manuel Ortiz del Solar, arcipreste de Los Santos Mártires y párroco de La Visitación de Santander, así como en Ricardo Alvarado del Río, arcipreste de la Virgen del Mar y párroco de Santa Cruz de Bezana.
Con estos dos últimos miembros, el obispo Mons. Manuel Sánchez, ha querido contar con los dos arciprestes que están al frente de dos importantes zonas urbanas, como la de Santander y su entorno urbano.
Modificación de los Arciprestazgos
En otro ámbito pastoral, el obispo de Santander ha reestructurado los arciprestazgos en que se divide la Diócesis cántabra, pasando de 16 a los 13 de ahora.
Su misión del arcipreste es la de fomentar y coordinar la actividad pastoral en su arciprestazgo, que engloba una porción de parroquias de la Diócesis.
Así, han sido designados arciprestes, José Manuel Ortiz del Solar (Arciprestazgo Santos Mártires); Domingo Landeras Landeras (San José); Fernando Tabernilla Alonso (Ntra. Sra. Del Carmen); Ricardo Alvarado del Río (Virgen del Mar); Francisco Antonio Blanco Ramos (Virgen Grande); Juan Carlos Velarde González (Santa Juliana); Juan Carlos Fernández Ruiz (Ntra. Sra. de Montesclaros); así como por Alejandro Solórzano Sánchez (Ntra. Sra. Del Soto y Valvanuz) y por Alberto García García (Santa María y Miera).
Igualmente han sido nombrado arciprestes, José María Salazar Corino (Arciprestazgo de Ntra. Sra. De la Asunción); Elías Hoyal Hoyal (Santa Cruz- Liébana) y José Rolando Cabeza Fuentes (Virgen de la Barquera).
Consejos Presbiteral y Pastoral
Entre las modificaciones, también ha sido elegido un nuevo Consejo Presbiteral, que está formado íntegramente por sacerdotes, entre los que figuran miembros natos (9), los arciprestes (13); miembros elegidos por el cauce de edad (4); representantes de la vida consagrada (2), a los que se suman cinco miembros más elegidos directamente por el propio obispo.
La misión de este Consejo presbiteral se comporta como un “senado” para el prelado y es un órgano representativo del presbiterio que ayuda al obispo en el gobierno de la Diócesis.
Por último, en la jornada de este sábado 27 de febrero, ha sido elegido en una sesión celebrada en el Seminario de Corbán el nuevo Consejo Pastoral Diocesano, formado por 36 miembros y que está integrado en su mayoría por laicos.
Como secretario de este Consejo ha sido designado el laico, Felipe Santamaría, que repite en el cargo y que también preside la Delegación Diocesana de Apostolado Seglar.
El cometido de este órgano es estudiar, valorar y sugerir al obispo actividades pastorales sobre la Iglesia.
Por último, esta semana también fueros elegidos los miembros del llamado Colegio de Consultores que cumple una importante tarea, sobre todo cuando una diócesis queda vacante.