Ayer, 30 de agosto, se celebró la tradicional Misa en honor de los santos mártires Emeterio y Celedonio.

Durante la Misa, presidida por el Nuncio de su Santidad en España, Mons. Bernardito Auza, se honraron las santas cabezas, reliquias que se conservan durante todo el año para la veneración pública de los fieles en la parroquia del Santísimo Cristo, iglesia baja del complejo Catedral.

Al finalizar la Misa tuvo lugar la bendición de la nueva sala capitular del Cabildo de la Catedral.

A la jornada se le puso el punto de folclore y tradición con la actuación de unos danzantes.