Uno de los 5 retos que se propuso D. Arturo al comienzo del año y que manifestó, junto a otras tantas autoridades del panorama civil, militar, académico… fue la que encabeza esta publicación.
El pasado lunes tuvo lugar el encuentro de todos los sacerdotes de la Diócesis, a los que se sumaron también los diáconos y seminaristas, que no se quisieron perder este encuentro.
Fue una jornada muy animada, con una participación casi absoluta del clero, justificada cada ausencia por algún ineludible. Lo cierto es que nadie se quiso quedar sin participar de esta reunión que comenzó con un tiempo de oración en la Iglesia del Seminario, con meditación incluida de D. Arturo en la que nos invitaba a renovar nuestro ministerio desde la ternura, la humildad… descubriendo que nuestra tarea es importante a los ojos de Dios.
A continuación se pasó a tomar un café, en que hubo un tiempo añadido para saludar y departir amistosamente, degustando un rico roscón de Reyes, gentileza de las Mercedarias de Noja.
El encuentro prosiguió con el momento más esperado: unas primeras palabras, ya no en clave orante, del padre y pastor de la Diócesis a sus colaboradores más directos. Fue un momento de compartir retos, de mostrar prioridades y de, también, dejar ver vulnerabilidades. Todo en un clima fraterno que después se materializó en una mesa compartida, tras la que cada sacerdote regreso a su tarea.