El sábado volvió a congregarse un representativo grupo de jóvenes (en número y en origen) que participaron del ya tercer retiro IGNIS.

En esta ocasión el Evangelio que enmarcó el encuentro con las diferentes charlas y el testimonio, fue el de la pesca milagrosa en que Jesús indica a algunos, de los que luego nutrirán el grupo de los apóstoles, dónde echar la red.

Muy en la línea del fin de semana enmarcado por la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, se trabajó en la necesidad de dejar que sea el Señor quien tome las riendas, quien nos haga caminar en la felicidad, que es esa pesca abundante y milagrosa.

En su testimonio Federico, miembro de la comunidad Fe y Vida, se «desnudó» interiormente al contar sus logros y fracasos… su pulso a Dios en algunos momentos de oscuridad y como en todo momento Dios lo acompañó, aunque tardó mas tiempo en darse cuenta de ello… Dios veló por que no tomase malas decisiones y siguiese cerca de Él. Damos gracias a Dios por este testimonio que, sin lugar a dudas, da Gloria a Dios.