El vicario genaral, D. Sergio Llata, el vicario de Asuntos Económicos, D. Jose Ramón Ocejo y D. Javier Asín, miembro del Consejo Económico de la diócesis.

La Iglesia cántabra ha hecho un llamamiento para que las personas que valoran su labor, se animen a marcar la X en la casilla de ayuda en favor de la Iglesia en la declaración de la renta de este año.

Para ello, se ha argumentado toda la acción evangélica, social y caritativa que “en tantos colectivos desarrolla la Iglesia. Si queremos que esta labor se siga desarrollando, es necesario colaborar con nuestra aportación”, subrayó el vicario de Asuntos Económicos de la Diócesis de Santander, José Ramón Ocejo Gutiérrez.

Con todo, la cuantía que la Iglesia recibe por la casilla de la “X” de la Declaración de Hacienda anual, sólo representa el 25% de sus ingresos, ya que el grueso sigue proviniendo de los fieles, mediante sus donativos.

Ocejo también instó a que se marcara, junto a la de la Iglesia, la “X” de la casilla de “Fines Sociales” porque así se contribuía en el trabajo social que llevan a cabo muchas ONG’s. Marcar las dos casillas es compatible y no se excluyen entre sí, “además no se paga más por estampar la X en nuestra declaración”.

Igualmente, el vicario de Asunto Económicos, pidió “que nos aseguráramos si en el borrador de nuestra declaración figuraban las “X” marcadas. Asimismo, solicitó a las personas que desean colaborar con la Iglesia, que recuerden a sus gestores que se marque la casilla de ayuda a la Iglesia y a la de los fines sociales.

En 2016, la Diócesis de Santander tuvo unos gastos de 13.318.068 euros que sirvieron para sufragar actividades pastorales y asistenciales, así como para pagar al clero (un sacerdote percibe poco más de 900 euros mensuales) y la Seguridad Social, entre otras partidas presupuestarias.

A estas cifras hay que añadir la acción caritativa que se canaliza a través de Cáritas o Manos Unidas, colegios educativos, Proyecto Hombre, Hogar Belén de enfermos de Sida, programas de reinserción social al mundo laboral, o los gastos que hay que afrontar en el mantenimiento y reparación de los 1.200 templos que entre iglesias y ermitas existe en la Diócesis y que en 2016 supuso un gasto de 5.635.699 millones de euros

Contribuyentes cántabros

Las cifras arrojan que un total de 104.870 contribuyentes cántabros marcaron la X de la Iglesia en la declaración de la renta correspondiente al año 2016, lo que supuso 3.903 menos que en el ejercicio anterior.

Con todo, Cantabria sigue estando por encima de la media nacional en lo concerniente a la colocación de la X en las declaraciones de la renta, con un porcentaje del 37,94%; mientras que la media nacional es del 33,54%.

Aunque en nuestra Diócesis estamos por encima de la media, el año 2015 registró mayor porcentaje en la marcación de la “X”, ejercicio que alcanzó un 39,25%. Aún así, la recaudación del IRPF de 2016 a favor de la Iglesia se incrementó en Cantabria en 79.689 euros y alcanzó los 3,1 millones. Esto fue así porque la cuantía a pagar en las declaraciones fue mayor debido al alivio de la crisis económica.

En la rueda prensa informativa se hallaron , igualmente, Sergio Llata, vicario general de la Diócesis y el laico Javier Asín, que pertenece al Consejo de Asuntos Económicos de la Diócesis. Este último, en su calidad de seglar, también animó a los cántabros para que contribuyan al sostenimiento de la Iglesia a través del IRPF.

Así, se subrayó que la Iglesia revierte a la sociedad “mucho más de lo que recibe”. Con esta frase podría resumirse la labor que ésta realiza con las aportaciones que obtiene de los contribuyentes, vía IRPF.

Asimismo, se resaltó que como consecuencia del patrimonio artístico y de eventos religiosos, muchos negocios de hostelería y comercios se benefician de la afluencia de visitantes que acuden a Cantabria

GABINETE DE PRENSA
Santander, 30 mayo 2018